Conexión Sur de Oliva. N-332 y AP-7

La carretera N-332 constituye el principal eje de vertebración de la comarca de La Safor, registrando actualmente en las proximidades de Oliva unos 10.000 vehículos diarios con un 7% de vehículos pesados, que atraviesan el casco urbano pese a la liberación de la autopista AP-7 en enero de 2020.

Con la puesta en servicio de esta nueva conexión al sur de Oliva y la conexión existente al norte de la población, se podrá emplear la autopista AP-7 como variante de la carretera N-332, disminuyendo así el tráfico en la travesía de Oliva especialmente en lo que respecta al tráfico de vehículos pesados, mejorando con ello la seguridad vial y la calidad de vida de sus habitantes. 

La nueva conexión tiene una longitud total de 2,5 km y su sección transversal consta de dos carriles de 3,50 metros de anchura con arcenes de 1,5 metros y bermas de 1,0 metro. Este nuevo tramo de carretera presenta tres conexiones:

En primer lugar, el enlace de la carretera N-332 con la autopista AP-7 se ha resuelto a través de un enlace tipo trompeta, con una estructura que cruza la AP-7 salvando las dos calzadas sin ningún apoyo entre las mismas debido a lo estricto de su sección.

Por otro lado, las obras incluyen la remodelación del enlace existente sobre la N-332, para independizar el tráfico de la nueva carretera del resto de movimientos con origen y destino las playas, el polígono industrial y los caminos municipales.

Por último, la conexión del nuevo tramo de carretera nacional con la carretera CV-715 que comunica los municipios de Oliva y Pego se ha resuelto mediante un nuevo vial de 850 m que conecta el enlace de pesas existente en la nacional, con una nueva glorieta construida sobre la carretera CV-715, evitando así el paso de este tráfico por el casco urbano de Oliva. En aras de facilitar y fomentar la movilidad de peatones y ciclistas se construye una conexión a distinto nivel entre el casco urbano de Oliva y el Camí Vell de Pego, que servirá para canalizar el tráfico ciclo peatonal en esta zona, mejorando la permeabilidad transversal de la infraestructura.

Se han realizado plantaciones en una superficie de más de 80.000 m2: 1.450 árboles (cedros, pinos y tuyas) y 6.517 arbustos (Adelfa, Taray, Coscoja, Romero y Lanvanda) que actuarán como sumideros de carbono para reducir la huella de carbono producida por los vehículos, contribuyendo así a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) con los que está comprometido el Mitma.

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