El programa de rehabilitación para la recuperación económica y social en entornos residenciales, incluido en la inversión 1 del componente 2 del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), pretende impulsar la rehabilitación de edificios residenciales, viviendas y barrios. La distribución de los fondos Next Generation EU entre los beneficiarios finales se canalizará a través de las Comunidades y Ciudades Autónomas, con las que se ha llegado a un acuerdo para la distribución de los recursos en proporción al número de hogares de cada región (Fuente: encuesta continua de hogares del INE de 2020).
A través del programa se prevé alcanzar las 510.000 actuaciones de renovación de viviendas en el segundo trimestre de 2026, lo que implica un ritmo medio de 71.000 actuaciones al año.
Para cumplir estos objetivos, el Gobierno ha aprobado un Real Decreto, un Real Decreto-Ley y, posteriormente, una Ley, que recogen un conjunto de medidas y programas diseñados para desarrollar la actividad y apoyar las actuaciones subvencionables con cargo al Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) aprobado por Europa para paliar la crisis económica causada por la pandemia de la Covid-19.
En concreto, los textos permiten implementar dos de las principales inversiones del PRTR centradas en el sector residencial y que están dotadas con 4.420 millones de euros:
Descripción de la imagen: Aparecen 3 recuadros numéricos. En el primero se refleja la cifra total de inversión: 4.420 millones de euros. En el segundo y el tercero se desglosan las cifras en 3.420 millones de euros en rehabilitación residencial y 1.00 millones de euros para el programa de construcción de viviendas en alquiler social en edificios energéticamente eficientes.
Fin de la descripción de la imagen.
El Real Decreto Ley 19/2021, de 5 de octubre y, posteriormente, la Ley 10/2022, de 15 de junio, de medidas urgentes para impulsar la actividad de rehabilitación edificatoria en el contexto del PRTR, entre otras cosas, han introducido una serie de beneficios fiscales (IRPF) por la realización de actuaciones de rehabilitación y una importante mejora del tratamiento de las ayudas a la rehabilitación, ya que no se integrarán en la base imponible del IRPF cuando hayan sido concedidas a través de distintos programas de ayuda, como los financiados con los fondos NextGenerationEU. Además, la nueva Ley refuerza la capacidad de las comunidades de propietarios para llevar a cabo obras de renovación y mejora de la eficiencia energética así como para financiar el coste no cubierto por los programas de ayuda
Real Decreto 853/2021, de 5 de octubre, por el que se regulan los programas de ayuda en materia de rehabilitación residencial y vivienda social del PRTR. Se divide en cinco programas que abarcan actuaciones a nivel barrio, edificio y vivienda; la creación de oficinas de prestación de servicios de apoyo y asesoramiento en materia de rehabilitación, la distribución de ayudas a la elaboración del libro del edificio existente y la redacción de proyectos de rehabilitación. Asimismo, incorpora un sexto programa para apoyar la construcción de viviendas en alquiler social.
En cuanto a los fondos para la rehabilitación y mejora de las viviendas, las Comunidades Autónomas, Ceuta y Melilla, los canalizan para que lleguen a los beneficiarios finales, bien mediante la firma de acuerdos con los ayuntamientos para la concesión directa de las subvenciones, bien mediante la publicación de convocatorias en concurrencia simple dirigidas a los propietarios o usufructuarios de los inmuebles, a los arrendatarios, a las comunidades de vecinos, a empresas públicas y privadas, entes y Administraciones Públicas, entre otros.
En el caso de las convocatorias, se seleccionarán los proyectos beneficiarios por riguroso orden de presentación de las solicitudes hasta el agotamiento de los fondos.
Los gobiernos regionales recibirán las ayudas vía resolución de transferencias entre 2021 y 2023.
La primera de ellas, por 1.151 millones de euros, se ejecutó en 2021. En el presupuesto para 2022 se establecen otros 1.389 millones y en 2023 se podrán transferir los últimos 430 millones, llegando a los 2.970 millones asignados a los programas gestionados por las Comunidades y Ciudades Autónomas. Los fondos se han distribuido entre las CCAA, Ceuta y Melilla según los porcentajes recogidos en la siguiente tabla en proporción al número de hogares (Fuente: encuesta continua de hogares del INE de 2020).
Descripción de la imagen: El gráfico muestra la imagen de 4 recuadros, los tres primeros reflejan por anualidades las cuantías de las transferencias que se realizarán a los gobiernos regionales: Primer recuadro, anualidad 2021, con una cuantía de 1.151 millones de euros.
Segundo recuadro, anualidad 2022, con una cuantía de 1.389 millones de euros.
Tercer recuadro, anualidad 2023, con una cuantía de 430 millones de euros.
En el cuarto recuadro se refleja el total que alcanza los 2.970 millones de euros.
Fin de la descripción de la imagen.
Los fondos se han repartido entre las CCAA, Ceuta y Melilla según los porcentajes recogidos en la siguiente tabla en proporción al número de hogares. (Fuente: encuesta continua de hogares del INE de 2020).
a cada comunidad o ciudad autónoma según el número de hogares
Descripción de la imagen: El gráfico muestra cómo se distribuyen los fondos del Programa de rehabilitación para la recuperación económica y social en entornos residenciales entre las distintas Comunidades Autónomas, Ceuta y Melilla. El reparto se realiza en función del número hogares de cada comunidad o ciudad autónoma y viene representado en %.
La transferencia de los fondos a las comunidades y ciudades autónomas se llevará a cabo en tres plazos anuales:
El Programa de rehabilitación para la recuperación económica y social en entornos residenciales se halla incluido en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) y está financiado a través de los fondos Next Generation EU.
Fin de la descripción de la imagen.
El objetivo global de las actuaciones es reducir al menos un 30% el consumo de energía no renovable en los hogares y descarbonizar y bajar la demanda de calefacción y refrigeración como mínimo un 7%.
Es importante acreditar la reducción del consumo y para ello un experto tiene que expedir un certificado energético de la vivienda o del edificio antes y después de la actuación.
La vía más efectiva para alcanzar los umbrales exigidos en el marco del PRTR es actuar sobre la envolvente del edificio, colocando aislamiento tanto en fachadas como en cubiertas, y sustituir las carpinterías por otras con rotura de puente térmico para evitar que el frio “se cuele” por las ventanas.
Nuestra razón eres tú