Las Tarjetas sin Contacto se han constituido en un elemento imprescindible en cualquier sistema moderno de Pago en el Transporte Público. Ante esta perspectiva y bajo el amparo del entonces Ministerio de Fomento, se inició hace unos años el Proyecto Tarjeta Española Sin Contacto (TESC) llegando a formar parte del Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda del Ministerio.
El Proyecto TESC se planteó inicialmente como una solución sencilla y estándar adaptable a cualquier Operador y Autoridad de transporte con el fin de limitar la heterogeneidad de soluciones que estaban apareciendo en cada entorno geográfico. Sin embargo, con el desarrollo de las reuniones se pasó a buscar una solución que permitiera la interoperabilidad de los diferentes Sistemas de Transporte.
Tras múltiples trabajos y pilotos desarrollados, el sistema finalmente definido se basa en una codificación segura que permite el registro de los usuarios al utilizar los servicios de diferentes operadores de manera que es posible una posterior gestión de la información donde se resuelvan las necesarias compensaciones económicas.
La base del Sistema es la Entidad o Entidades Coordinadoras que mantendrán relaciones contractuales y económicas tanto con los operadores adscritos al Sistema como con Entidades Emisoras TESC, que emitirán códigos para facilitar el acceso al Transporte a sus clientes.
Para el usuario, la TESC, es una funcionalidad agregada a cualquier tarjeta física o virtual (wearable, SIM-NFC, elemento seguro, etc) sin contacto, sea o no de transporte. TESC se basa en una codificación única, sencilla y segura, almacenada en el espacio libre de cualquier tarjeta sin contacto en funcionamiento, o de nueva creación. Como podrá verificarse, las estructuras de información definidas son susceptibles de ser utilizadas más adelante soportadas por otras tecnologías como códigos QR, Bluetooth, etc., con las que transmitir la identificación del usuario que accede al Sistema de Transporte.
El sistema corresponde a los modernos planteamientos de pagos basados en cuenta (ABP-Account Based Payments). También permite establecer monederos virtuales de prepago y títulos mediante localizadores que permiten también el necesario carácter anónimo de algunos usuarios además de constituir una de las mejores soluciones para el billete sencillo. El procesamiento del pago puede ser online y offline, en concreto se puede incorporar el ODA (Offline Data Authentication) si no hay comunicaciones, se prioriza la aceptación de pasajeros con rapidez, las compras son de bajo importe o la aplicación de tarifas variables.
Existe un modelo de tarifa avanzado, en el cual el usuario desconoce el coste del billete cuando accede, ya que el precio se determina al final del día, semana o mes, según el periodo seleccionado. Este modelo permite establecer tarifas variables según distintos criterios relacionados con la agregación de pagos, la segmentación del cliente, el trayecto o los establecidos por parte del operador de transporte, entre otros.
TESC no pretende sustituir a las tarjetas sin contacto actuales, que deberán seguir siendo utilizadas como en la actualidad por los usuarios habituales de la red de transporte asociada a cada tarjeta. Esta tecnología en cambio es especialmente adecuada para utilizarse en los viajes realizados por usuarios no habituales que procedan de otras redes de transporte o redes de clientes que utilicen esporádicamente el transporte público. También puede ser un buen instrumento para la promoción del uso del transporte público en determinados eventos o por parte de centros comerciales.
Este sistema se está planteando además como la base de interoperabilidad que facilite el despliegue de servicios de Movilidad como Servicio (MaaS-Mobility as a Service) en España. Así, además de facilitar la interoperabilidad entre distintas redes de Transporte Público, se podrá facilitar el acceso al mismo desde otro tipo de operadores: Car Sharing, bicicleta pública, Parking, taxi, peajes, etc.